Probablemente sepa que Viena es la capital de Austria, pero también de la música, el arte, la arquitectura elegante y los cafés acogedores. La gente dice que esta ciudad cosmopolita ofrece la mejor calidad de vida del mundo, como lo demuestran sus numerosas puntuaciones. El 30% de los residentes no son austriacos, ya que la ciudad es muy diversa y atrae a muchos extranjeros que vienen a estudiar o trabajar cada año.

Viena es conocida por dos apodos: La Ciudad de la Música, por ser cuna de algunos de los mejores compositores de música clásica, como Mozart, Joseph Haydn, Beethoven y, por último, Johann Strauss. El segundo apodo es La Ciudad de los Sueños, por ser el hogar del primer psicoanalista del mundo, Sigmund Freud, que vivió y trabajó en la ciudad durante gran parte de su carrera, teniendo un impacto significativo y convirtiéndola en la cuna de la psicoterapia.

Entre los personajes populares de Viena se encuentra también un mecánico de instrumentos finos llamado Erwin Perzy, que intentaba mejorar el brillo de las bombillas para una lámpara quirúrgica e inventó accidentalmente una bola de nieve. El croissant, el famoso pastel que todo el mundo asocia con Francia, es en realidad originario de Viena. Seguimos con todos los "hechos sorprendentes" sobre Viena añadiendo el hecho de que es una capital vinícola que produce importantes cantidades de vino dentro de los límites de la ciudad. Los vieneses saben divertirse y cada año se celebran en Viena más de 300 bailes.

¿Me creería si le dijera que puede adoptar una rosa durante cinco años seguidos en el Schlosspark Schönbrunn o en el Volksgarten? Sorprendentemente hay una larga lista de espera, así que mejor apuntarse cuanto antes. Otro dato inesperado es que el famoso PEZ, la divertida pastillita de caramelo, tiene su origen en Viena. El dispensador se diseñó para que pareciera un mechero. En aquella época estaba prohibido fumar, así que el eslogan de Pez era "No Smoking - PEZing Allowed".

Y el punto dulce final: quien no haya probado la deliciosa tarta Sacher, un manjar de chocolate y especialidad del hotel del mismo nombre, se sentirá como si nunca hubiera estado en Viena. Actualmente, es el único lugar que elabora la 100% auténtica Sachertorte, produciendo más de 270.000 piezas al año. Los tradicionales cafés vieneses figuran en la lista del Patrimonio Cultural de la UNESCO.

Los corazones de los amantes de la arquitectura cantarán ante edificios como el Hofburg, sede de los Habsburgo con su preciosa colección de joyas de la corona, el castillo más famoso de Austria, Schönbrunn, el monumento gótico más importante de Austria, la catedral de San Esteban, en pleno centro de Viena, el neogótico Rathaus, rodeado por el hermoso Rathauspark, el magnífico castillo barroco Belvedere y la iglesia Karlskirche, en la plaza Karlsplatz de Viena. La mayoría de las atracciones turísticas son reliquias de la época imperial de Viena.

Si prefiere una arquitectura más moderna, no se pierda la Hundertwasserhaus del extravagante arquitecto Hundertwasser o el segundo edificio más famoso de Viena de esta controvertida figura, la central térmica de Spittelau. Si además quiere disfrutar de una experiencia artística o cultural, diríjase a la mundialmente famosa Ópera de Viena o al teatro más famoso de Austria, el Burgtheater. Sería una pena no visitar el famoso parque de atracciones Prater de Viena, con sus coloridas atracciones para grandes y pequeños.